BUENOS AIRES.- Los árbitros Carlos Maglio y Andrés Merlos fueron parados anoche por un partido, aunque por diferentes razones, ya que el primero lo fue por "indisciplina" y el segundo por "mal desempeño".
El caso de Maglio es inédito, ya que el juez no fue "sancionado" por haberse equivocado al arbitrar el encuentro que empataron 1 a 1 Rosario Central y San Lorenzo, y ni siquiera por haber sido visto tomando un café con el presidente "Azulgrana", sino por la hora en que fue descubierto en esta acción. Es que Maglio coincidió en un local gastronómico del centro rosarino con Matías Lammens a la una de la madrugada del domingo mismo del partido, algo considerado como una falta por el Colegio de Arbitros, indicaron fuentes de este organismo.
Lo de Merlos fue diferente, ya que en su caso sí se juzgó como deficiente su tarea en el cotejo que Lanús le ganó en Avellaneda a Racing por 3 a 1.
En tanto que otro árbitro, en este caso Diego Ceballos, indicó que a las expulsiones del delantero colombiano Miguel Borja y el defensor Juan Sills, se sumó, una vez terminado el encuentro que el equipo de ambos, Olimpo, perdió uno a cero con Boca, en Bahía Blanca, la del ex zaguero "Xeneize" Iván Furios. Borja fue expulsado en el primer tiempo por aplicarle un cabezazo al defensor Mariano Echeverría, que le provocó un corte en la frente, mientras que Sills y Furios fueron sancionados por protestar.